Después de años en las garras de una terrible enfermedad como es el alzheimer, en la madrugada del pasado viernes 8 de octubre de 2010, fallecía mi querida madre, Candelaria Melián Hernández, sin dolor, con una sonrisa y un semblante de paz.
Que revoltijo de pensamientos se suceden en mi mente, cuantas imágenes de la niñez se amontonan en mi memoria...cuantas escenas vividas junto a mi madre, cuantos acontecimientos, cuantos sacrificios, cuantos sinsabores, cuantas risas alegrías, satisfacciones...
Mi madre tuvo una larga vida, vivió de forma sencilla ajena a todo lo que no fueran sus hijos, su hogar, sus plantas y su máquina de coser. Jamás le importó lo que sucedía en la calle ni la vida de nadie.
Y Dios ha querido que muriera como vivió, sin hacer ruido, sin molestar a nadie, simplemente se durmió una noche y ya no despertó.
Dejando a un lado la emoción y el dolor que me embarga en estos momentos, me siento profundamente orgullosa de mi madre porque vivió una difícil juventud en la posguera española donde todo eran privaciones, crió cuatro hijos en una España en plena dictadura, donde era muy duro sacar a los hijos adelante.
Cumplió el papel que le fue encomendando la vida como hija, esposa, madre, y abuela.
Hace cinco días perdí a mi madre, y con ella murió una parte de mí, de mis raíces, de mis recuerdos.
Siento un sentimiento de vacío que no puedo evitar, ni tan siquiera me sirve de atenuante el que ya era muy mayor y el alzheimer se había cebado cruelmente con ella.
Me consuela en estos momentos pensar que en su camino se habrá reunido con mi querido padre, y que desde allí ambos irradiarán con su luz a sus seres queridos que nos hemos quedado por aquí y que tarde o temprano acudiremos a su encuentro .
Mientras mamita querida nuestras oraciones, nuestra gratitud, y nuestros cariño te llegarán al cielo y acariciarán tu amado rostro.
¡Adiós mamá! No dejes nunca de velar por tus hijos y nietos que te lloran desconsoladamente
Quiero dar las gracias en nombre de mi familia y en mío a todos los que nos han acompañado en estos momentos tan duros, gracias a todos los que no han podido venir y se han disculpado. Me siento realmente emocionada
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